Nuestras Novias

Elena y Víctor, la magia de los segundos encuentros

El día 22 de Octubre de 2016, se convirtió en una fecha especial para Elena y Víctor. El gran compromiso tuvo lugar en el Santuario Nuestra Señora de la Caridad situado en Illescas, Toledo, en un entorno muy cómodo y familiar.

Desde muy pequeños, compartieron las aulas escolares en el mismo pueblo dónde se criaron ambos y sus respectivas familias. Pero no fue hasta años más tarde que el destino les brindó la oportunidad de volverse a encontrar. Una vez acabada la universidad, Víctor empezó a a trabajar en una asociación de personas con discapacidad organizando las salidas y el ocio del centro, justo en el mismo lugar que las amigas de Elena. Un fin de semana, Elena decidió pasar una corta estancia que se terminó convirtiendo en una oportunidad para volver a coincidir con el hombre de su vida. La conexión entre ambos fue palpable desde la primera conversación que mantuvieron, haciendo que cada día las chispas fueran a más.

“Es increíble saber y tener la certeza que has encontrado a la persona con la que quieres compartir el resto de tu vida”

El resto de la celebración tuvo lugar en el Complejo París de Illescas. Estuvo lleno de sorpresas, y los novios tuvieron el placer de disfrutar de una coreografía bailada por todos los invitados. El padre de Elena también decidió tener un gran detalle entonando una poesía que conmovió a todos los asistentes. Sólo hubo espacio para grandes momentos durante todo el acto haciendo de éste algo memorable.

Elena llegó a las manos de Ángeles gracias a la recomendación que le hizo su amiga. Tenía unas ideas muy claras que se fueron perfilando bajo nuestra asesoramiento personal. En todo momento respetamos las ideas que ella nos traía al taller, ofreciéndole siempre nuestra humilde opinión y confeccionando el que sería el vestido de su vida.

El tul fue el protagonista de todo el conjunto. Las líneas rectas conformaban el diseño y el estilo del vestido enmarcado por un elegante escote barco. Las mangas francesas a base de plumeti decorado en encaje daban ese toque sofisticado y elegante al total look de la novia. No podemos negar que las emociones estaban a flor de piel en cada prueba que le realizábamos a Elena, pero su gran colaboración y nuestro esfuerzo supusieron la perfecta combinación.

Llegó el gran día y Elena decidió rodearse de las mujeres de su vida minutos antes de dar el "sí, quiero", las cuales la ayudaron a mantener la calma y vestirla para el gran día entre sonrisas, bromas y mucho cariño.

Peinado: Elena confió plenamente en Glamour Estilistas y Silvia para la realización del peinado. Creía que un moño sería la mejor opción para la ocasión, centrando sobretodo el protagonismo en el vestido.

Maquillaje: Para el maquillaje contó con la ayuda de Mercedes de Musk, optando por un estilo más romántico y resaltando los enormes y preciosos ojos de Elena. 

Zapatos: el elegido para calzar a la novia en esta ocasión tan especial fue Jorge Larrañaga. Los confeccionó ella misma, de estilo peep toe y de tiras cruzadas. Era una apuesta segura para lucir como una princesa. A juego, unos pendientes azules de Swaroski y una pulsera de de circonitas, que fueron un regalo que le realizaron sus amigas antes de la boda.

Tocado: la pieza que lució Elena era de la marca Letouquet. El velo fue confeccionado en nuestro taller, siguiendo la misma estela de calidad y diseño que el vestido.

Fotografía: el encargado fue Jesús María Domínguez que hizo que los novios se sintieran tranquilos y cómodos en todo momento.

Flores: tanto las de la iglesia como el ramo fueron realizados por CentroFlor.

“Lo que más ilusión nos hizo fue ver allí a toda la gente que queremos, sentirnos tan queridos y sobre todo, saber que nos hacemos felices el uno al otro uniendo así nuestras vidas”

“La boda fue un sueño, amaneció nublado e incluso llovió antes de la ceremonia, pero cuando salí del coche para entrar en la iglesia ya no caía ni una gota. El día estaba con nosotros y quería regalarnos un poquito de luz”

Nos vamos de boda con Montse y Karl!

Karl y Montse se conocieron de fiesta en un barco en los Fiordos noruegos. Qué bonito sitio para conocerse, ¿no?. Ese día fue a amor a primera vista. Desde entonces, fueron enamorándose cada día más. A pesar de la distancia que los separaba en los inicios de su relación, no fue obstáculo para ellos y ahora viven juntos en Madrid.

Para Montse, no solo hicimos su vestido de novia, sino el mono que llevó el día de la preboda y los vestidos que lució su madre para ambos días.
El mono estaba confeccionado con una tela estampada en blanco y azul, una combinación ideal para una fiesta en la playa.

Después de un día de preboda precioso, Karl y Montse se casaron el 18 de julio en el Club de Golf de El Rompido, un lugar especial para los novios ya que su gente lo hace único. La ceremonia fue en la iglesia de San Pedro de Cartaya, en Huelva.

Montse llevaba unos zapatos azul claro hechos a medida en Keli&Salo y aplicaciones en en los puños y espalda elaborados por Carmen María Mayz, quien también se encargó de hacer el tocado joya que complementaba el peinado. Los pendientes fueron un regalo muy especial de sus abuelos, diseñados por Montse y elaborados en su joyería de confianza.

Montse organiza todo tipo de eventos, desde bodas hasta bautizos, comuniones y fiestas privadas. Por eso, disfrutó mucho todo el proceso que conlleva la planificación de una boda. Todo estaba pensado para que fuese tal y como ella lo había imaginado, aunque una vez que empezó la ceremonia dejó todas las preocupaciones a un lado para disfrutar de los detalles más emotivos. Con la ayuda de Karl, Montse organizó su propia boda rodeada de los mejores profesionales del sector.

Lo que siempre les digo a las novias es que lo más importante es que disfruten de su día al máximo y que no dejen de sonreír en ningún momento
Una anécdota muy graciosa fue que a la entrada de la iglesia la gente lugareña nos preguntaba que si eramos familia de algún duque, conde o de la realeza! vieron a Karl con el traje típico noruego. Por suerte no somos gente de la realeza, somos gente muy sencilla a la que le gusta no dejar de sonreír y compartir momentos como nuestra boda con los las personas a las que más queremos.

Los fotógrafos han sido Saavedra y Peñalba Fotógrafos especialistas en bodas y que siempre logran captar los momentos con total naturalidad.

Nos vamos de boda con Virginia e Israel a Valladolid!

La ceremonia y la celebración se llevaron a cabo en La Posada Real del Pinar en Pozal de Gallinas (Valladolid) durante un caluroso 16 de Mayo. Los padres de Virginia se habían casado un 18 de mayo y le hacía mucha ilusión repetir esa fecha tan memorable. Toda su boda, fue un símbolo para recordar a una de las partes más importantes de su vida, sus padres.

Esta finca era el lugar ideal por sus 130 hectáreas de terrero, que simbolizan la zona donde los novios nacieron. Una finca típica de Castilla, con pinar y los elementos rurales con los que la pareja creció.

Israel y Virginia se conocieron hace más de 20 años cuando trabajaban de camareros en un mítico bar de los 90, el "Haciendo Skina". Allí crecieron, vivieron, compartieron y maduraron juntos en una gran familia durante los 10 años que duró abierto. Después de muchos años separados, cada uno viviendo en distintos países, sus vidas se encontraron y decidieron que todo este tiempo, habían estado esperando el uno por el otro. Poco tiempo después, estaban comprometidos en secreto. Fue una sorpresa para todos sus conocidos excepto para el padre de Virginia, que fue el primero en enterarse!

Virginia llegó a nuestro taller de la mano de nuestra amiga y wedding planner Ay Letizia!, que nos acompañó durante todo el proceso. Le hicimos un vestido ajustado a la cintura para resaltar su figura, con una espalda ideal que se transparentaba y en la parte superior estaba unida con una cadena dorada.
El tocado y el aplique de la cintura los hizo Carmen María Mayz, los zapatos en verde y bronce fueron elaborados por el Taller Resán y las joyas habían estado dentro de la familia desde siempre. El anillo de oro con un topacio era de su madre y a Virginia siempre le había hecho ilusión llevarlo en una ocasión especial y ¿qué mejor ocasión que su propia boda?. Los pendientes eran de oro y habían pertenecido a su abuela.

Su peinado y maquillaje son de Estilismo Maria Alejandra.

La ceremonia, fue un momento que creo que nadie de los que estuvimos allí podremos olvidar. Tuvimos 8 testigos-amigos que firmaron en nuestro enlace y ese momento le tendré también grabado para siempre.

Virginia nos confiesa que han sido unos novios un poco anárquicos y que no querían llevar alianzas. Aunque estuvieron mirando algunas opciones, al final decidieron que solo se querían dar sus votos en público junto a las personas que más querían. Pero un mes antes de la boda, su madre le dijo que a su padre, que había fallecido poco tiempo antes de la boda, le habría hecho muchísima ilusión que llevasen las alianzas que los habían unido durante todos estos años. Y así fue... ella lleva la alianza de su madre e Israel, la que había pertenecido al padre de Virginia.

La boda de Virginia e Israel, cargada de detalles especiales y muy emotivos, fue fotografiada por Sara Lobla

Desde aquí, le deseamos a Virginia e Israel la mejor de las suertes! Mil gracias por haber contado con nosotras para este momento tan especial. 

Chaqueta de cuero y vestido de novia!

Hace un tiempo publicamos un post con la boda de Magdalena y César, pero esta vez la novia nos ha sorprendido con esta sesión de fotos!

Sombrero, chaquetas de cuero y accesorios ideales le dieron a Magdalena un look bohemio que nos ha encantado. ¿Qué os parece esta idea?
Animaros a usar vuestro vestido de novia una segunda vez!